Después del confinamiento por la pandemia, los jóvenes requerían espacios para reconectarse y socializar. Con los Juvencamps se divierten, aprenden a trabajar en equipo, a enfrentarse a retos, mejoran su autoestima y autoconfianza, poniendo en práctica valores como la solidaridad, respeto y empatía. Asistieron 1 mil 849 personas.