El estrés hídrico es una de las evidencias de la presencia del cambio climático en el estado. Como una política de adaptación instalamos 35 Sistemas de Captación de Agua de Lluvia, Scall, con enfoque de potabilización en escuelas de 18 municipios, con capacidad de almacenamiento de 10 mil litros cada uno. Se beneficia con ello a una población escolar de más de 1 mil 235 personas, que ahora cuentan con agua potable para su consumo, además de reducirse los problemas de salud.